Solamente 5 minutos duró la llave de vuelta de Copa Chile entre laicos y azules, en los cuales ocurrió de todo, debido a que la UC alcanzó a marcar el tanto que empataba la serie y un minuto después se debió suspender por la detonación de fuegos artificiales en contra del portero de Universidad de Chile
4 minutos y 47 segundos alcanzó a durar la revancha entre cruzados y azules, válido por la revancha de los cuartos de final de la Copa Chile 2022, en el estadio Elías Figueroa de Valparaíso.
La verdad es que pasó de todo, ya que el duelo recién comenzaba y Felipe González, arbitro del partido, pitó un dudoso penal a favor de la UC, el cual el Toro Zampedri cambió por gol para empatar la serie, pero la alegría duraría un par de segundos, ya que pocos segundos después vino el bochorno.
Entre los festejos, desde la barra de la Católica cayeron tres bombas de estruendo. Los petardos estallaron a metros y centímetros del arquero de la U, Martín Parra, quien se fue al suelo aturdido por el impacto acústico de la detonación, considerando además que el hecho pudo ser aún más grave y hasta de consecuencias fatales.
Tras tensos minutos, Parra debió ser sacado de la cancha en camilla y subido a una ambulancia. El arquero fue trasladado a una clínica de la Región Metropolitana. Desde la U informaron que el jugador sufrió un trauma acústico severo y agudo. Quedará internado esta noche en observación.
Considerando que la competencia perteneciente a la FFCh, desde el organismo informaron que “este jueves el directorio de la Federación de Fútbol de Chile se reunirá a las 13:00 horas para analizar lo sucedido y tomar una decisión con respecto al futuro del partido”.