“Pollo” Fuentes, amigo y colega del cantante, cuenta que al cantante “le dio una depresión que lo afectó psicológicamente”.
Luis Dimas, destacado cantante de la “Nueva Ola”, falleció a los 78 años durante la noche del pasado miércoles 17 de noviembre. Su hijo, Salvador Misle, anunció la triste noticia en sus redes sociales, recibiendo las condolencias inmediatas de los seguidores del “rey del twist”.
Para entregar más detalles de la muerte de su padre, el hijo del cantante conversó con radio Bío-Bío asegurando que el hecho fue “súper repentino“, ya que no se esperaban su deceso.
“En los últimos meses y días, mi papá estaba bien de salud. Yo lo vi hace unos días atrás y estaba bien. Hoy (miércoles) se descompensó y fue una falla multisistémica. Fue repentino, fue sorpresivo la verdad“, reveló Salvador Misle, hijo del fallecido Luis Dimas.
El mismo hombre señaló que su padre “nunca estuvo solo. Efectivamente estaba un familiar en el momento de su descompensación y desde ahí partió al hospital”.
“Pollo” Fuentes cuenta los últimos días de su amigo, Luis Dimas
En conversación con “Mucho Gusto“, José Alfredo “Pollo” Fuentes, amigo y colega de Luis Dimas, reveló que la pandemia y parte del estallido social afectaron sumamente a la salud del “rey del twist”: “No sólo agravó sus problemas del corazón, sino que le dio una depresión que lo afectó psicológicamente“.
Un hombre pionero
Ya a principios de los años 60, Ricardo García, destacado discjockey y célebre figura de los medios de esa época, fundamental en el despegue de muchas carreras, lo descubre y se convierte en su padrino artístico. Veía ahí -tras mirar sus presentaciones en encuentros colegiales y festivales comunales- un natural talento en bruto a explotar.
Lo llevó a presentarse en varias radioemisoras de la capital y le presentó a Jaime Román, promotor del sello Philips, quien por ese entonces buscaba un nuevo cantante para el conjunto The Lyons.
The Lyons era algo así como un semillero de grandes créditos del período: por ahí habían pasado Peter Rock, Jorge Pedreros, Toly Ramírez y hasta el mismísimo Palito Ortega, pero antes de su seudónimo más célebre, cuando era conocido simplemente como Nervy Nelson y se quedaba a alojar en piezas y residenciales en el centro de Santiago.
Tras un par de pruebas, Dimas se calzó el traje de voz de los Lyons bajo un sino fijo y singular: debía ser la réplica chilena de Chubby Checker, el atlético y también corpulento rey del twist en Estados Unidos. Ahí donde Peter Rock replicó los movimientos telúricos, los tics expresivos, la voz frenética y las poses de galán en plan cinematográfico de Elvis, Dimas hizo lo propio con Chubby: copió sus pasos de baile y sus movimientos bajo el ritmo de moda, con composiciones cuyos títulos no dejaban duda en torno al género y al sonido al que apelaban: El twist, Peppermint twist y Let’s twist again.
Tal como cuando se inició cuando niño, fue sencillamente irresistible para los medios de esa época, siempre a medio camino entre el asombro y la ingenuidad.
Pero el mérito de Dimas no recayó sólo en saber calcar el estilo de otra estrella del Hemisferio norte. En la épca en que triunfaba uno de los primeros grandes hits rockeros facturados 100% en el país como El rock del mundial, de The Ramblers, asomó como un creador capaz de facturar canciones en español y de despachar éxitos de sonido afilado y eléctrico, pero diseñados a pura chilenidad.